viernes, 3 de julio de 2015

Cabuyería

Hoy salgo del trabajo y me voy al náutico a las cinco y media de la tarde. Ya no aprieta tanto la canícula, y se puede estar agradable sentado en cubierta. Santi lleva todo el día arrancando cables, y sudando dentro de la cabina, yo me voy a dedicar a otros menesteres más relajantes: voy a hacer una gaza trenzada en uno de los cabos de las defensas.
El trabajo de cabuyería es una de las cosas que más destacan en un barco velero, dada la cantidad de cabos que se ven sobre la cubierta, el hecho de que estén bien anudados y preparados, le da muchos puntos al aspecto exterior. Así que, manos a la obra...
 Las defensas están atadas con un as de guía común y silvestre... Nudo versátil donde los haya, pero feo para un elemento que está en la fachada de nuestro barco.
 La ventaja del as de guía (como todos los nudos marineros bien hechos) es que no se azoca, es decir, aunque hace décadas que se ató, y ha pasado un montón de agua salada y sol por el nudo, en cuanto aflojamos la tensión y damos un par de tironcitos, ¡hop! ya está suelto.
 Todos los ingredientes a mano: el cabo y la defensa, un cutter, una aguja hueca para gazas, cinta aislante e hilo para ayustar. ¡Manos a la obra!
 Una vez pasado el cabo por la argolla de la defensa, y marcados los extremos de la gaza con cinta aislante, se separan los tres torones del chicote y se comienza a trenzar sobre el cabo, ayudándonos de la aguja para gazas.
 La primera vuelta; la gaza ya va tomando forma.
 Después de seis vueltas, hay que entresacar alguna filástica de los torones que aún no están trenzados, para que la trenza vaya menguando paulatinamente.
 Una vez trenzados todos los torones hasta el final, es hora de ayustar la gaza: rematar la punta con hilo para que no se deshaga. Aunque es bastante resistente tal y como ha quedado, nunca está de mas darle un par de puntadas.
 ¡Ale-hop! una gaza trenzada estupenda colgando de la borda del Entre dos azules. ¿Es un barco con clase o no? Me ha costado una hora de trabajo, y he reciclado un cabo que ya tenía a bordo.
A ti te toca mañana... ;-)

2 comentarios:

  1. Creo que voy a tener que comprarme un diccionario... mare mia!!!! jejeje

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  2. No te creas... yo tuve que tirar de Google porque había términos que no recordaba... jajaja...
    Pero me has dado una idea... El Diccionario Marinés - Español del Capitán Pescadilla. Habrá que ver cómo lo monto... ;-)

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